Role of sports psychology and sports nutrition in return to play from musculoskeletal injuries in professional soccer: an interdisciplinary approach.

Musculoskeletal injuries are prevalent in professional soccer and can result in lost training time or match play. It is intuitive that the "return to play" (RTP) pathway will depend, in large part, on the expertise of sports medicine practitioners (e.g. surgeons, physicians, physiotherapists) responsible for player's recovery. Consensus statements on returning athletes to sport following injury acknowledge the contributions of sport psychology and sports nutrition. However, specific consideration on how to integrate these two recognized - but often overlooked components of injury rehabilitation - into existing sport medicine approaches has yet to be examined. Using a framework of milestones directed by the medical physician and physical trainer, the evidence is summarized and suggestions provided on the integration of sports psychology and sports nutrition into an interdisciplinary RTP approach. We examine recovery from a phase approach (acute injury and functional recovery) to highlight interdisciplinary opportunities in the management of musculoskeletal soccer injuries. An interdisciplinary approach is understood to achieve outcomes that could not be achieved within the framework of a single discipline. The incorporation of sports psychology and nutrition theoretically compliment milestones used in current medically-based RTP models. Our hope is that this article serves as a catalyst for interdisciplinary practice and research - not only in sports nutrition and sports psychology - but across all sport and exercise disciplines.

Ondas de choque extracorpóreas: evidencias científicas de sus indicaciones en patología musculoesquelética / Extracorporeal shock wave therapy: scientific evidence of its indications in musculoeskeletal disorders

El tratamiento de lesiones músculoesqueléticas mediante ondas de choque extracorpóreas, ha suscitado el interés de la comunidad científica europea en los últimos veinte años. A nivel mundial ha despertado enorme interés desde que la F.D.A. (Federal Drug Administration) norteamericana aprobara su uso para el tratamiento conservador de la fascitis plantar en octubre de 2000. En la actualidad las ondas de choque extracorpóreas se presentan como una alternativa más en el arsenal de los métodos conservadores del tratamiento de las afecciones del aparato locomotor. Este artículo de revisión resume el estado actual de la evidencia científica de la indicación del uso de las ondas de choque extracorpóreas en patología músculoesquelética (AU)

Uso de la isoestación B-200 y electromiografía de superficie en la valoración del dolor lumbar / Assessment of low back pain with the isostation B-200 lumbar dynamometer and surface electromyography

Objetivo: Estudiar la fuerza isométrica del tronco en los tres ejes del espacio y actividad eléctrica de la musculatura erectora del tronco y oblicuos abdominales en una población normal, otra con patología lumbar conocida y otra normal fingiendo lumbalgia. Método: La fuerza se midió con una isoestación B=200® y la actividad muscular con un electromiografo superficial ME3000P® de cuatro canales. La población normal estuvo formada por 36 individuos, la patológica por 39 pacientes y la de fingidores por 16 voluntarios. Resultados: El grupo de fingidores mostró significativamente menor fuerza que los otros dos grupos en todos los ejes (p < 0,001), mientras que el de patológicos sólo mostró una disminución significativa de fuerza con respecto al normal en flexión (p < 0,001). La actividad eléctrica de la musculatura erectora fue mayor en el lado contralateral alas rotaciones en el grupo de normales y fingidores, mientras fue mayor en el lado homolateral a las rotaciones en el grupo de patológicos. La actividad eléctrica de los oblicuos fue similar bilateralmente durante las rotaciones en los grupos normal y de fingidores, mientras que estuvo claramente disminuida en la musculatura contralateral al sentido de la rotación en el grupo de patológicos. Estos hallazgos pueden ser útiles para diferenciar pacientes con lumbalgia de aquellos que intentan fingir dolor (AU)